viernes, 22 de junio de 2012

Trigonometría o realidad

Libre, intransitivo...inmerso en un mar de dudas que no son tales. Obtuso en ocasiones, cuadrado a veces pero siempre saliéndome por la tangente. Considero imprudente  hablar de mí como infinito pero, sin pretender ser caótico, son tantos los caminos que da la libertad que porqué no cometer ese desvarío...
En diagonal cruzo por la vida porque es más largo que ir cuesta arriba y menos agotador... Derivado hacia una forma oblonda con efecto boomerang...¿quién no acaba cometiendo sus mismos errores una y otra vez? Si hasta parece que nos guste lo de que el resultado no varía aunque se altere el orden de los factores...al final no nos engañemos: pecamos de lo mismo.
Tampoco deberíamos olvidar no elevar las emociones al cuadrado...acercarnos a ese punto equidistante desde el cual todo cambia. Tomar perspectiva. Porque ¡señores! que las situaciones, a parte de pintarlas calvas, son solo momentos emocionalemente comprometidos y vistos desde su mismo epicentro, lo que conlleva una GRAN desventaja: la cercanía. Y cercanía no tiene porqué ser igual a realidad y más para un hipermétrope como yo que de cerca todo se distorsiona (¿o eso es la miopía?). Bueno en fin y en resumidas cuentas que las matemáticas para los matemáticos y a mi que me dejen la vida y una pluma.