miércoles, 24 de agosto de 2011

Fugacidad

Cuán caprichoso el tiempo que, juguetón, tan pronto tiende a correr demasiado como a estancarse en un charco de agua corrompida. Corre resbalando de entre mis manos sin poder asirlo, ni rozarlo, y a veces se ralentiza de tal forma que se vuelve denso, ladrón. Robando espacio y ganas, afanándose vidas.
Tiempo,
             tiempo
                       ...un concepto indefinido, irregular, irrespetuoso. En muchas ocasiones innecesario. El tiempo es algo intangible, no tiene la capacidad de arreglarlo todo, no es un virtuoso de las causas perdidas. No, no lo es. Nunca espera, no se detiene a comprobar si se ha solucionado todo...nunca frena y siempre pasa. Ni permanece ni te pertenece.
Nunca ha estado en tus manos...

No hay comentarios:

Publicar un comentario